«En retrospectiva, la principal dificultad de los últimos diez años ha sido implementar una [sustainability] estrategia en 72 países, en entidades cuyas prioridades y problemas son completamente distintos. En ese sentido, haber trabajado en línea con los Objetivos del Desarrollo Sostenible ha resultado ser acierto gracias a su universalidad».
Entrevista a Laurence Pessez, directora de RSC del grupo BNP Paribas
Después de firmar los Principios de Banca Responsable de la Iniciativa Financiera del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA FI) y de crear un puesto para promover la conservación y el uso sostenible de los océanos, sin duda podemos decir que 2019 será un año productivo para el departamento de Sostenibilidad del grupo BNP Paribas, y especialmente para quien ha sido su directora de RSC durante diez años, Laurence Pessez.
¿Cómo llegó a ser una líder en sostenibilidad en una empresa CAQ40 (índice de las principales empresas francesas)? ¿Cómo es su día a día?
Desde el principio de mi carrera me he centrado en ámbitos que generan un impacto positivo, ya sea en los hospitales de París, el grupo La Poste o en el sector de los seguros. Con esta determinación ayudé a crear el departamento de Sostenibilidad en BNP Paribas, y asumí su responsabilidad en 2010.
Estoy convencida de que la sostenibilidad es tanto un reto estratégico como una fuente de oportunidades, y trabajo para asegurarme de que se tiene en cuenta en todos los niveles del banco.
Gracias a la labor de mi equipo, la sostenibilidad se ha convertido en una prioridad para BNP Paribas, como refleja la creación en 2017 del departamento de Compromiso Empresarial y la posición que el banco ha adoptado recientemente de reducir a cero el uso de carbón térmico en 2030 en la Unión Europea, y en 2040 en el resto del mundo.
Estas iniciativas contribuyen directamente a los desafíos actuales que se contemplan en los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODD): erradicar la pobreza, proteger el planeta y garantizar que todas las personas gocen de prosperidad para 2030. Gracias a nuestra posición en la economía, tenemos la oportunidad de tomar medidas para trabajar en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible. Estos grandes desafíos, que afectarán a las generaciones futuras, son retos apasionantes.
¿Qué tamaño tiene su equipo de sostenibilidad?
El departamento de Compromiso Empresarial es el que se encarga de implementar los compromisos de sostenibilidad del banco, y tiene representación en el comité ejecutivo del grupo.
El departamento de Sostenibilidad está formado por un equipo de casi 30 personas y está estructurado según distintas especialidades: gestión de riesgos extrafinancieros, finanzas de impacto positivo, relaciones con los accionistas en cuanto a sostenibilidad y promoción de los derechos humanos, medio ambiente y transición energética, microfinanzas y emprendimiento social y, finalmente, comunicación y gestión del fondo de emergencia y desarrollo.
Las personas que crearon esta organización han generado una mayor conciencia a medida que nuestras responsabilidades en las cuestiones medioambientales y sociales han ido aumentando. Todas estas personas son expertas en su campo de especialidad, y el equipo al completo es una referencia dentro de la empresa.
¿Qué tamaño tiene su equipo de sostenibilidad?
El departamento de Compromiso Empresarial es el que se encarga de implementar los compromisos de sostenibilidad del banco, y tiene representación en el comité ejecutivo del grupo.
El departamento de Sostenibilidad está formado por un equipo de casi 30 personas y está estructurado según distintas especialidades: gestión de riesgos extrafinancieros, finanzas de impacto positivo, relaciones con los accionistas en cuanto a sostenibilidad y promoción de los derechos humanos, medio ambiente y transición energética, microfinanzas y emprendimiento social y, finalmente, comunicación y gestión del fondo de emergencia y desarrollo.
Las personas que crearon esta organización han generado una mayor conciencia a medida que nuestras responsabilidades en las cuestiones medioambientales y sociales han ido aumentando. Todas estas personas son expertas en su campo de especialidad, y el equipo al completo es una referencia dentro de la empresa.
¿Qué hitos de sostenibilidad ha alcanzado la empresa en los últimos diez años?
La necesidad de cumplir las expectativas de la sociedad en cuanto a los principales bancos e instituciones financieras ha pasado de ser un elemento positivo a ser imprescindible.
Antes de 2015 y de la COP 21, la sostenibilidad y la responsabilidad empresarial (RSC) eran principalmente iniciativas voluntarias, con las que el grupo BNP Paribas, con la libertad de ampliar sus ambiciones, ya estaba comprometido. También estábamos comprometidos a crear conciencia a nivel interno: primero lo hicimos en las políticas de financiación y de inversión en los sectores de defensa y del aceite de palma (2010), y después integramos criterios extrafinancieros en el cálculo de la bonificación de 5000 gerentes de BNP Paribas (2013).
Por primera vez, en el plan estratégico de 2014-2016, BNP Paribas se comprometió a desarrollarse como banco responsable. Así, 2015 supuso un punto de inflexión: contamos con el apoyo y el compromiso de la dirección ejecutiva para cuestiones ambientales y sociales, se celebraron varios debates a nivel del comité ejecutivo del grupo y hubo intercambio de ideas entre nuestro director general y nuestros clientes. También fue el año en el que se establecieron los 17 Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODD) de las Naciones Unidas. BNP Paribas fue una de las primeras empresas en Francia que mencionó los ODD en su definición de estrategia de sostenibilidad.
Nuestro equipo recibe el apoyo de una red de aproximadamente 130 profesionales de la sostenibilidad que trabajan en distintas divisiones y líneas de negocio, y establecen redes para facilitar la implementación de la política de sostenibilidad en todo el grupo.
Eso sin contar, por supuesto, los 202.000 empleados del banco, a quienes también animamos a tomar medidas en respuesta a estas cuestiones.
2015 también fue el año en el que entramos en el Global 100 de Corporate Knights Global, uno de los índices de sostenibilidad con mayor reconocimiento internacional.
Desde 2017 y desde que creamos el departamento de Compromiso Empresarial, hemos ampliado nuestra acción y nuestro compromiso en todos los ámbitos.
Entre los principales logros del banco, podemos destacar haber alcanzado la neutralidad en emisiones de carbono en nuestro perímetro operativo en 2017, y la publicación de los estatutos de relaciones comerciales responsables en 2018, mediante los cuales BNP Paribas demuestra su deseo de trabajar con las empresas que tengan un mayor desempeño en sostenibilidad. Ese mismo año, nuestro grupo contribuyó a la creación de los Principios de Banca Responsable, que firmamos oficialmente en 2019 junto con otros 130 bancos, con el objetivo de alinear las estrategias comerciales con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas y el Acuerdo de París.
Más recientemente, el banco ha anunciado la fecha de salida de la industria del carbón y también su entrada en el Compromiso Colectivo de Acción por el Clima. Además, también se ha comprometido a financiar la transición ecológica de buques mercantes con la considerable cifra de 1000 millones de euros para 2025.
En julio de 2019, BNP Paribas fue nombrado el mejor banco del mundo en responsabilidad empresarial por Euromoney, una publicación líder en finanzas internacionales, así como el mejor banco del mundo según criterios ambientales, sociales y de gobernanza por parte de Capital Finance International (CFI.co).
En conclusión, la principal dificultad a lo largo de estos diez años ha sido implementar una estrategia de sostenibilidad en 72 países, en entidades cuyas prioridades y problemas son completamente distintos. En este sentido, haber trabajado en línea con los Objetivos del Desarrollo Sostenible ha resultado ser una estrategia potente debido a su universalidad.
Yo diría que lo que supone un reto a diario es la diversificación de los accionistas, una situación que no es exclusiva del sector bancario.
Durante mucho tiempo, las ONG y los sindicatos eran los únicos que cuestionaban las prácticas de las empresas grandes y los departamentos de RSC. Más adelante, también empezaron a hacerlo los inversores a largo plazo, como los fondos de pensiones y las compañías de seguros, especialmente en términos de riesgos sociales y climáticos. Después llegaron las peticiones por parte de clientes de todos los segmentes, entre negocios y también del público general.
Actualmente, incluso los empleados lo demandan y pueden tomar la iniciativa. Dentro de nuestro grupo, por ejemplo, la decisión que tomamos en 2017 de cortar la financiación y las actividades de inversión relacionadas con empresas de tabaco surgió de la iniciativa de algunos empleados.
Si nos fijamos en otros casos más recientes, vemos que estudiantes y la generación más joven en general están emprendiendo acciones en pos de cuestiones sociales y medioambientales (el Manifiesto estudiantil para un despertar ecológico reunió 30.000 firmas). Por último, la sostenibilidad es ahora un tema estratégico e importante y cada vez está más regulado con, por ejemplo, la ley francesa del deber de vigilancia de las empresas multinacionales, la ley de esclavitud moderna del Reino Unido o la labor de la Comisión Europea en taxonomía, cuyo objetivo es definir las actividades que contribuyen a la transición energética.
Es un cambio muy positivo para los departamentos de sostenibilidad, ya que podemos trabajar con contactos cada vez más creíbles y familiarizados con nuestro negocio.
¿Podría terminar hablando de EcoVadis brevemente?
Pedimos a EcoVadis que nos evaluara por primera vez en 2010.
La calificación EcoVadis nos permitió medir nuestro desempeño como proveedor responsable en ámbitos como el medio ambiente, las decisiones de compra, las condiciones laborales y los derechos humanos, y la ética empresarial.
En nuestra opinión, esta evaluación ha ido ganando relevancia, ya que valora cuestiones materiales para nuestros clientes, tanto los existentes como los potenciales. EcoVadis elabora el cuestionario en función del cliente.
Algunas de nuestras filiales o líneas de negocio muy específicas tienen su propia calificación EcoVadis, como, por ejemplo, Arval, que es nuestra filial de alquiler de vehículos a largo plazo, o BNP Paribas Real Estate, nuestra filial inmobiliaria. En 2019 Arval obtuvo una puntuación de 70/100, por lo que recibió el reconocimiento de nivel «oro».
Para BNP Paribas, la plataforma EcoVadis es una interfaz que aporta valor de cara a nuestros clientes y posibles clientes. A través de esta plataforma, los clientes pueden acceder a los resultados del grupo y sus distintas entidades, sus puntuaciones y un informe detallado sobre su desempeño en los distintos ámbitos. Hasta la fecha, hemos añadido unos sesenta clientes y posibles clientes a la red EcoVadis del grupo (la lista de empresas a las que damos acceso a nuestro perfil).
La interfaz permite centralizar una cantidad determinada de información que resulta útil para los clientes en el contexto de las licitaciones. Supone un ahorro de tiempo para nuestros departamentos de Sostenibilidad y de Ventas. Finalmente, es un vector empresarial importante porque BNP Paribas participa sistemáticamente en la evaluación y la calificación anual, y esto nos permite destacar como proveedor responsable y comprometido a abordar la sostenibilidad de manera más profunda y estructurada.
La iniciativa para recaudar fondos que ha llevado a cabo EcoVadis para acelerar el desarrollo internacional de la plataforma es una gran noticia; nuestras licitaciones son internacionales y nuestros clientes potenciales más importantes son de fuera de Francia. Es por eso que EcoVadis sigue siendo una entidad francesa independiente especializada en las calificaciones empresariales y de sostenibilidad.
La versión original de esta entrevista se publicó en francés y también está disponible en inglés, en italiano y en alemán.Acerca del autor
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