Mientras nos preparamos para despedirnos de 2020 y dar la bienvenida a 2021 con los brazos abiertos, hemos pensado en cuáles son las principales tendencias y avances en materia de sostenibilidad que esperamos ver en los próximos meses. Mientras la crisis del coronavirus continúa , se intensifica la atención sobre la necesidad urgente de renovar los esfuerzos en sostenibilidad en la cadena de suministro, y el nuevo año ofrece un momento perfecto para hacerlo. En pocas palabras, hay mucho trabajo por hacer, así que hemos desglosado aquello que prevemos para 2021.
- Las organizaciones darán prioridad a la reducción de las emisiones de alcance 3 (en la cadena de valor) para impulsar una acción climática duradera. Hasta la fecha, la atención se ha centrado en reducir las emisiones de alcance 1 y 2. En 2021, un mayor número de empresas se dará cuenta de que no es posible progresar si no se reducen las emisiones en toda la cadena de valor. Esta tendencia se verá acelerada por las iniciativas corporativas y sociales (por ejemplo, las grandes empresas que se comprometen con el SBTi y fijan objetivos alineados con el Acuerdo de París), las nuevas normativas (por ejemplo, la inminente subida de los impuestos sobre el carbono en Europa) y las mayores restricciones a los combustibles fósiles.
- El diversity-washing se convertirá en el nuevo green-washing. Los consumidores, los inversores y las partes interesadas se centrarán menos en las cuestiones de diversidad a nivel superficial y exigirán a las empresas que ofrezcan total transparencia sobre las prácticas y los comportamientos de la plantilla y la cadena de suministro. Los indicadores de propiedad de minorías serán menos importantes en las decisiones de abastecimiento e inversión. Se valorará la diversidad de la mano de obra, el trato a los empleados y los compromisos con la diversidad, tanto a nivel de marca como de proveedor.
- Volverá la "Mano Visible". Los próximos 10 años traerán consigo más normativas sobre sostenibilidad, ya que se pide a los legisladores que utilicen su poder para mejorar los resultados en sostenibilidad no sólo dentro de sus propias jurisdicciones, sino en la cadena de valor mundial. Europa contará con el Green Deal de la UE, y Norteamérica con el esperado regreso de Estados Unidos al Acuerdo de París. La Mano Visible señalará a los rezagados en materia de sostenibilidad, obligándoles a cambiar para sobrevivir. Al mismo tiempo, impulsará a los pioneros y a los líderes, dándoles ventaja en materia de inversiones, fusiones y adquisiciones, crecimiento y beneficios.
- El blockchain perderá algo de protagonismo en la cadena de suministro. El mercado concluirá finalmente que las prácticas de blockchain no son una solución factible para resolver los problemas de visibilidad de la cadena de suministro. En cambio, se invertirán más recursos en comprometer a los proveedores, en la mejora colaborativa y en la gestión basada en incentivos. La visibilidad instantánea dejará de ser el objetivo, que se centraré en la creación de capas concéntricas de mejora del rendimiento a largo plazo, en las que los proveedores aplicarán enfoques sostenibles e impulsarán los requisitos y aprendizajes en sentido ascendente.
- Las consecuencias económicas de la COVID-19 pondrán a prueba las prácticas sociales. Durante el brote inicial, la atención se centró (lógicamente) en la seguridad de los trabajadores. Sin embargo, al cabo de unos meses, miles de personas se quedaron o bien sin apoyo, o con un exceso de trabajo, poniendo las cadenas de suministro en riesgo de incumplimiento de los derechos humanos. A estas situaciones les siguió una resaca económica con muchos sectores enfrentándose a largas recuperaciones y a una inmensa presión para obtener resultados. Las grandes empresas mundiales, especialmente las de los sectores de más lenta recuperación, deben estar muy atentas a sus proveedores y prestar más atención a los derechos humanos y las cuestiones sociales para asegurarse de que no recortan para sobrevivir.
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El aumento y la redefinición de la resiliencia harán que la optimización de la cadena de suministro pase de ser «justo a tiempo» a ser «solo por si acaso», elevando los enfoques de sostenibilidad de la resiliencia al rendimiento. La pandemia ha hecho que la gente se replantee lo que hace y cómo lo hace, con un importante giro hacia la resiliencia. En 2021, más organizaciones descubrirán que los enfoques populares en 2020, como la diversificación de proveedores y la deslocalización, no abordan el núcleo del problema. La resiliencia real requiere que las organizaciones renueven sus programas de gestión de la sostenibilidad, centrándose en las relaciones con los proveedores, la mejora continua y el rendimiento a largo plazo.
Muchas cosas cambiaron a lo largo de 2020, pero hay algo seguro: nuestra conferencia anual, Sustain, cambió para siempre cuando vimos a 1.600 asistentes virtuales interactuar con más de 50 expertos y líderes en el evento online.
Estamos entusiasmados de celebrar de Sustain 2021, en formato totalmente virtual, donde tendrá la oportunidad de participar y escuchar nuevos puntos de vista, debatir sobre soluciones y asociaciones innovadoras, y conectar con profesionales y expertos de varias regiones. ¡La inscripción está abierta!
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